Vestido con la camiseta amarilla de la selección brasileña, y acompañado por su esposa Michelle, el ex mandatario, Jair Bolsonaro, de 69 años, había convocado a sus partidarios “a un acto pacífico, en defensa de la democracia y por nuestra libertad, sin carteles ni pancartas”.
El domingo, ante decenas de miles de personas reunidas frente a la playa de Copacabana, el expresidente brasileño Jair Bolsonaro dijo que “el mundo entero es consciente de lo amenazada que está nuestra libertad de expresión, y vine aquí a luchar por eso, porque en Brasil no tenemos más ese derecho”.
Además, Brasileños conservadores elogiaron a Elon Musk el domingo, cuyos problemas jurídicos crecen en forma paralela a la disputa del empresario con el Supremo Tribunal Federal del país sudamericano.
“Brasil le agradece a Elon Musk”, rezaba un amplio letrero en inglés en el mitin en la playa Copacabana de Río de Janeiro.
Varios oradores elogiaron a Musk en el mitin del domingo.
“Lo que ustedes ven aquí es a personas que aman la libertad, que no se darán por vencidas ni se arrodillarán ante dictadores; personas que están dispuestas a dar sus vidas por la libertad”, dijo Gustavo Gayer, legislador que simpatiza con Bolsonaro.